como masa que reposa
sobre una mesa extendida.
Como ese rizo de pelo
que viaja desbocado
de tu frente a tu mejilla.
Como una bella cascada
en tonos de agua vivida.
La soledad hoy es dulce,
y mañana se hace fría.
Es dulce, si estamos solos
es fría, si soy yo sola,
si no se une, tu piel con la mía.
La soledad no halla puertos,
es un barco a la deriva...
que viaja dando vueltas
en callejón sin salida.
Es día de soledades
de la tuya... de la mía.
Soledades sin retorno,
soledades de por vida.
© Mercedes del Pilar Gil Sánchez #AbuelaTeCuenta