—¿Qué
te pasa Despistina
Por qué
es que has de llorar?—
—¡Se ha
perdido mi olla,
Esta
mañana… Mamá!—
Decía
la peque maga,
Mientras
sus ojos de bruja,
No cesaban
de llorar.
—¡¿Si…
es la noche de brujas?!…
La
tenemos que encontrar….
Has de
tener más cuidado!
O tu
carrera de magia,
Esta
noche acabará.—
Le
reprendía su madre,
Recordando
que sus cosas,
Es
prioritario cuidar.
La
olla, lo escuchaba,
Oculta
en el más allá.
Estaba
muerta de miedo,
Se
negaba a regresar.
Despistina
asustaba,
A la
olla sin cesar.
Pues en
la noche pasada
No
paraba de explotar
Equivocó
siete veces,
El
conjuro a ensayar.
¡Regresa
ya, Valentina!
Suplicaba
a la olla,
La
preocupada mamá.
Valentina,
nuestra olla,
Se
negaba a regresar.
¡Que no
vuelvo… que me quedo!
¡Que a
eso, no juego más!
¡Me asustan explosiones!
¡Retumban…
Ya no puedo más!
Despistina
prometía,
No
volverla a asustar.
Regresó
la buena olla
Con Despistina
a jugar.
Un BlOOOOOmmm
enorme sonaba
Y el
gran corro de brujas,
Espantadas,
en escoba
Volando a la
luna van.
Y las
ollas de las brujas,
Corren,
hacia el más allá.
¡Ay!...
¡Ha sido un despiiiisSssTeEeeee!
¡No os
vayáis! ¡RetornaAAADDDD!
¡Por
FaAAAAVorrrr!!!! Brujas Amigas!!!
¡Por
favor, REGRESAAAAAAADDDDDD!!! ¡Yaaaaa!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tus comentarios son utiles e importantes
Gracias por tus palabras.